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viernes, 20 de noviembre de 2020

Dos Cafés y cuatro Pastelillos



1 café expreso en La Habana usualmente cuesta como promedio 50 centavos de dólar. Un pastelillo de calidad cuesta como promedio 30 centavos de dólar. Una botella de agua mineral de las pequeñas unos 55 centavos de dólar.

Por lo tanto dos cafés , 4 pastelillos   y una botella de agua cuestan mas o menos 3.30 de dólar.

Cada dólar ( o peso convertible) cuesta 25 pesos normales.
Mi salario era entonces de 550 pesos normales mensuales.

Cuando mi padre enfermó a finales del 2008 y casi muere yo rogaba  que no sufriera. Que prefería verlo partir antes de verlo sufrir. Sentado al pie de la cama trataba de reconocer, en aquel anciano que perdía peso cada día  porque casi no comía, y que entre mi mamá y yo cambiábamos  varias veces durante la noche por la incontinencia , a mi padre.
Y un día se durmió. Ya no sufría en apariencia. Y entonces  rogué ques me guiara en el camino de su regreso a nosotros. Porque tampoco lo quería dormido, vegetando. Y fueron visitas y visitas de médicos, y me quedé sin un centavo porque cada semana era un tratamiento diferente, una esperanza diferente.
Algunos me decían, la mayoría, que ya todo había acabado. Solo uno me dijo que lo tomara de la mano y le hablara. Que un día despertaría.
Y así lo hice.
Y un día despertó.
 A los seis meses justos.
Atontado y distante aun no me reconocía. Preguntaba cuando regresaría a su casa.
Pero poco a poco le fuimos ganando terreno a lo imposible, dejando como secuela cierta debilidad motora.
Pero claro, ya no podía salir a sus diarias y  largas  caminatas 'el solo.
Entonces una vez a la semana salíamos juntos.
Por un lado yo , por el otro su bastón .
Y nos sentamos a tomar su café en la avenida 23, céntrica, llena de vida,  y es increíble como la mirada de un anciano se puede parecer a la de un niño curioso. Y con cierta malicia y cara de goloso me pregunta si  sería posible comprar dos pastelillos “para acompañar el cafecito”.
La gente lo mira un poco extrañado porque como tenia una traqueostomía permanente daba la impresión de que dice algo muy importante y secreto cuando me habla.
“Y claro papá, siempre hay pastelillos por acá”
Y nos tomamos nuestros cafés , nuestra botella de agua natural, y los 4 pastelillos cada semana.
 Regresamos a casa tomados de la mano (¡tenia pavor de que se me cayera!).
Son dos horas de paseo con alguien que con amor traje de vuelta de algún lugar misterioso y oscuro.
Y por el camino de regreso ya me iba rompiendo la cabeza , pensando como mantener ese ritmo.
Porque cada semana eran 82.50 pesos normales que debia convertir en dólares .
Cada mes 330 pesos de mi salario de 550
Y solamente para dos horas cada semana entre un padre y su hijo, un instante en la eternidad y solo  un grano de arena en las montañas de problemas que tiene  esta humanidad.