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jueves, 18 de enero de 2024

EMIGRAR

  Hace poco intercambiaba con un amigo sobre un post en Facebook  que hablaba sobre la emigración cubana a EEUU y a otros países. Algo que nos preocupa a todos los niveles, desde los familiares de los que emigran hasta el gobierno que pierde una población muchas veces joven y preparada durante años con enormes cantidades de recursos y que ahora emigran y trabajan fuera de Cuba.

y por supuesto hay mucha tela por donde cortar. Después de decidir tener un hijo, emigrar es la decisión más transcendental que se pueda tomar. Sus consecuencias marcarán la vida para siempre. En mi opinión es una decisión obvia en el 10% de los casos, por la guerra, por desastres naturales que arrasan territorios y vidas. Y cada vez más emigrar es el producto de una manipulación en todos los niveles, y muchas veces una manipulación que salió mal décadas atrás. En el caso de Cuba es la manipulación económica y política de la vida cuyo objetivo era derrocar un sistema político, la teoría de la olla de presión. Pero hasta ahora y por decenios la presión se libera en el sentido contrario, los cubanos se van a vivir al fuego que causa la presión, al lugar donde no existen los problemas que tenemos acá. 

aquí están algunas de mis consideraciones.

Creo que emigrar no es el destino de nadie. el que lo hace echa por la borda un trabajo sutil que comenzó en otro plano mucho antes del tiempo de nacer para coincidir con seres afines de otras vidas, aun los enemigos. Emigrar, a nivel espiritual es sencillamente sabotear un trabajo previo.

Ciertamente no todos lo ven así, y aunque lo vieran de esta manera precisamente parte del juego de la vida es tomar decisiones, el libre albedrio que indica la madurez del alma.

por otro lado, emigrar después de haber cumplido o hecho importantes tareas en este plano es diferente a emigrar cuando se comienza el camino, cuando el camino esta claro y abierto delante.

Por ejemplo, naciste en Cuba, estudiaste medicina, te hiciste médico y tienes un trabajo que hacer aquí o vinculado con tu país y decides marcharte dejando vidas y destinos abandonados. 

y es curioso que en los debates en internet se obvian argumentos inteligentes por argumentos individualistas y egoístas

Dicen que desde el 2021, más se 12 000 personas vinculados al sistema se salud de Cuba han emigrado.

¿por que ignorar completamente las personas que tuvieron que morir para que cambiara algo en una sociedad injusta? Formar 12 000 médicos y enfermeros en un país del tercer mundo es algo milagroso, 12 000 personas que posiblemente no hubieran sido profesionales médicos  si se mantenían las condiciones anteriores y que ahora en su mayoría no salvarán  vidas o curaran a otros, y mucho menos en el lugar donde nacieron, se formaron, y donde se suponía que ejercieran.

Obvio, en esos debates hay  una lista interminable de razones y argumentos para auto convencerse de que han tomado la decisión correcta para sus vidas. Y casi ninguna tiene que ver con la libertad sino con lo material.Von el tiempo a diferencia de la emigración de otros países, la cubana se siente frustrada y comienza a culpar al gobierno cubano de su mala decisión, envenena sus declaraciones y conductas y llega finalmente a pedirle al gobierno americano que bombardee su patria. 
Ciertamente no todos llegan a ese extremo, pero siempre me recuerda al escritor Reinaldo Arena que en su testamento culpaba a Fidel Castro por haber sido infestado del VIH y morir de SIDA. En su lógica si no se hubiera marchado de Cuba él no habría enfermado y muerto. En su lógica nada tuvo que ver la serie de decisiones personales equivocadas.

En esencia, abandonar el lugar donde naciste es traicionar tu espíritu interior, es posponer las tareas que viniste a hacer en el lugar designado para ti. 

Sufrirlo, crecer en espíritu y hasta morir de decepción es parte del proceso y la razón por la cual naciste en Cuba, o en Palestina, o en Esparta: para que crees un traidor, una víctima, o un guerrero y se tengan hijos valiosos y valientes o seres desarraigados que tendrán que sufrir una vida en vano porque sus padres no pudieron ver más allá de sus egos.

 Es algo complejo y no tiene caso discutirlo, solo dejar que fluya. En el caso de Cuba está ocurriendo una limpieza de gente que realmente no es necesaria en el proceso, cualquiera que sea, que ha recomenzado. Pero al mismo tiempo te estas marchando dese el lugar que haces falta hacia el lugar donde sobras.

 Por otro lado surge una nueva generación de creyentes en una idea , en un proceso que está siendo obstaculizado y saboteado desde por delincuentes hasta personas que sencillamente adoran otros modelos y políticas ajenas

 Te lo resumo en una frase que escuché: Dios te ha puesto en la balanza y no pesas nada. Ya solo resta comer, respirar, dormir y eventualmente morir lejos del lugar al que fuiste designado para aprender y crecer .

 ¿La diferencia entre personas? La honestidad, la renuncia a los egos por los hijos, por ejemplo

No necesitas escribir un largo discurso para excusarte, o convencer a otras personas, incluso que no conoces.

El amor es la lección de  vida. Lo que pasó con nuestros padres, la búsqueda de una familia a toda costa, y ahora perseguir los fragmentos de los que más te necesitan, en caso de que tus hijos hayan emigrado, y ya comenzó el proceso de derrumbe.

 Pero al menos  no te desarraigas, y posiblemente retornes a cumplimentar el karma que te corresponde después de una pausa. Eso lo decidirás , o no, solo el tiempo lo dirá.

mientras, acá estamos.






DE MI BLOG DE TURISMO

lunes, 9 de julio de 2018

Yo, Maestro (1)

Se aproxima el fin del curso. Usualmente no hago recuento al final de cada curso, siempre ha sido así, un comienzo, un final, un volver a empezar. 
en el mundo de hoy un articulo tan largo es un lujo, pero escribo mayormente para mi, para que no este' solo en mi computadora, para guardarlo en la nube.
es solo otra historia.
Quizás sea que me ha tocado vivir uno de los momentos más difíciles de la sociedad cubana, una época aún más aguda en escaseces y limitaciones de todo tipo, y entonces al finalizar el curso he tenido que continuar trabajando en lo que aparezca y que tenga que ver con lo que me gusta, los idiomas, por ejemplo. Quizás también tenga que ver que en el 1999 mi padre enfermó de cáncer y tampoco podía darme el lujo de disfrutar al menos de más horas de sueño por vacaciones, que era a lo máximo que se podía aspirar en aquellos años pues no había, ni hay todavía, mucho más para alguien que sea maestro.
En realidad no han sido muchos años de maestro. Antes comencé el camino de médico. En la sociedad cubana hay una gran tradición de médicos. Incluso hubo una época que se decía que en Cuba existían 3 clases sociales: la burguesía, los trabajadores y los médicos.
Yo solo tenía claro que quería escoger una carrera con la cual dejar una huella en la vida de los demás. Medicina sonaba romántica y fascinante. Magisterio sonaba mal pagada y agotadora. Pero en todo caso eran las dos que me llamaban. A medida que se aproximaba el momento de decidir la presión para que no escogiera ser maestro aumentaba, según los que me rodeaban era la última carta de la baraja. Cualquier carrera estaba bien excepto ser maestro.
Y así escogí medicina por las razones equivocadas. Y así “perdí” casi 4 años.
He sido maestro en las montañas, en un aula pequeña, luminosa y fresca de día y oscura por no tener electricidad en la noche. Aula de día, dormitorio de noche. Con doce chicos y chicas de diferentes edades en el día, y totalmente solo en las noches. Tan oscura y calurosa dentro que me sentaba en un banco afuera a mirar las estrellas mientras comía en un plato plástico rosa que estaba roto por un costado. Así que la sopa tenía que tomarla en un jarro de metal. Cansado, pero feliz por el reto de darle clases a tres grupos de edades diferentes en una sola aula en un mismo día. En aquellos tiempos me pareció romántico y aventurero. Me dicen que ya hoy esa aula no existe pues los campesinos se han ido mudando a la ciudad más cercana.
He sido maestro de lengua inglesa para funcionarios del gobierno en oficinas que miraban al malecón. He sido maestro de lengua española para alemanes en oficinas con aire acondicionado, pizarras blancas y en vez de tizas que manchan los dedos de cal bolígrafos negros para escribir sobre ellas.
He sido maestro de niños de tercer grado, de secundaria (7mo, 8vo, 9no grados) y de pre-universitario (10mo, 11no y 12mo).
He sido maestro desde el año 1998, y desde entonces no he tenido un solo verano de vacaciones porque los maestros ganamos poco y la vida es cada vez más cara , porque al contrario de lo que pensaba, la vida no se hizo más fácil, la familia enferma y envejece y hay nuevos chicos, más gastos. Entonces hay que trabajar el doble, es decir, también en las vacaciones. He trabajado como guia de turismo, camarero en cruceros, rentando autos, dándole clases de inglés a prostitutas en una época en que estaba prohibido tener moneda extranjera y solo ellas podían, a través de sus clientes, entrar en las tiendas, así que me pagaban en especie, es decir, he dado clases por jabones, champú y pasta de dientes. He dado clases durante el día y llevado a turistas al cabaret Tropicana en las noches, para al día siguiente volver a la escuela.
Y muchas veces me han preguntado si me debo quedar como maestro en una época en que el tiempo parece correr más rápido y todo parece precipitarse, quedando gente como yo en el camino del progreso y el consumo, es como esa figura que se va volviendo más pequeña en el espejo retrovisor del coche cuando le pasas por al lado en tu coche del año.
Pero entonces, y a veces, hay recompensas. Pequeñas en magnitud si la contabilizamos, es decir, la ponemos en valor monetario, pero con una alta carga de valor espiritual y humano.
Cada cierto tiempo me sucede que un ex alumno me visita, y cada año pueden ser más, espero. Gente joven, adultos ya, que vienen a agradecer algo que solo ha sido mi aporte a algo que todos llevamos dentro, pero que en realidad cada vez se nota menos. El amor por los otros y no solo hacer el trabajo por el que nos pagan.



Pero nada, como dije al principio, siempre ha sido así, un comienzo, un final, un volver a empezar


Humberto
Guia Local en la Habana.
Historia, Sociedad, Politica.
whatssap +53 52646921
email: cubangel@gmail.com

viernes, 6 de julio de 2018

MILENIALS Y MILENIALS CUBANOS

MILENNIALS

Los milenials es la generación que nació aproximadamente después del 1994. La preocupación principal sobre ellos radica en que son muy difíciles de lidiar, y son acusados de ser engreídos, narcisistas, interesados solo en ellos mismos, sin concentración, haraganes, pero engreídos es lo principal.

Y como son incapaces de crear liderazgos ni de creer en ellos, algunos líderes se les han acercado  para averiguar qué es lo que pudiera interesarles. Les han preguntado qué es lo que realmente quieren. Ellos usualmente responden que quieren trabajar en un lugar con propósitos y objetivos, que quieren tener un impacto en la sociedad (aunque no tienen muy claro lo que sea que eso signifique: ser modelo, cantante famoso o jugador de futbol) quieren comida, comodidades y placeres en abundancia. Lo curioso es que la mayoría de los mileniums (los que tienen una familia con una  economía que lo permite) tienen todo eso y no son felices, hay una pieza perdida en el rompecabezas.

Los maestros que desde hace un tiempo comenzamos a tenerlos como alumnos  dividimos el problema en cuatro partes:

11)      Los padres
22)      Tecnología
33)      Impaciencia
44)      Medio social
Los padres:

muchos de los milenials han nacido sujetos a lo que los psicólogos y pedagogos llaman  el fallo de las estrategias parentales , es decir, el fallo en la educación de los hijos, donde, por ejemplo, se les dice todo el tiempo que son especiales, que pueden obtener todo lo que quieran en sus vidas solo porque así lo deseen, muchos tienen notas altas porque los padres gastan enormes sumas de dinero o influencias y no por esfuerzos propios, muchos reciben premios por haber pasado de grado aun cuando fueron los últimos en su clase. Esto último es totalmente contraproducente al contrario de lo que creen los padres porque los hace sentir avergonzados al saberse que no la merecen, lo que los hacen sentirse peor.
Dentro de este grupo generacional ya algunos se están graduando de universidades, consiguiendo trabajos, es decir, caen en el mundo real e instantáneamente comprenden que no son especiales, que mamá no puede hacer que los promuevan, que por supuesto no reciben elogios por ser los últimos y mucho menos tienen lo que quieren solo por desearlo.
Inmediatamente su mundo comienza a resquebrajarse.
Estamos teniendo una nueva generación con una autoestima más baja que la generación anterior. Sus modelos a seguir son vacíos y superficiales en su mayoría y sus héroes son personajes de ficción.
Por otro lado es la generación de Facebook e instagram donde viven una realidad paralela, donde  postear cosas, vivir a través de cosas y mostrar que la vida es maravillosa aun cuando estamos deprimidos. En ese mundo de las redes sociales todos somos tipos duros que nos las arreglamos en la vida para ser triunfadores, cuando la realidad para la mayoría no es así. E insisten año tras año en la misma actitud sin tener idea del porqué.
Así que tenemos esta generación con problemas de los cuales ellos no tienen culpa, sino los adultos que lo crearon.

Tecnología:

Sabemos ya que la relación con la tecnología y las redes sociales libera una sustancia llamada dopamina. Así que cuando enviamos un sms se siente bien, así que cuando nos sentimos un poco solos enviamos un SMS, o vamos a Facebook o cualquiera otra red social y le enviamos a la mayor cantidad de personas posible: hola, hola, hola hola, hola. . . porque se siente bien cuando nos responden. Esa es la razón por la que regresan varias veces en el día a ver si tienen respuesta en internet, o sms, etc. Si no es así, entonces comienzan a atormentarse porque posiblemente están haciendo “algo mal”, “ya no me quieren como amigo”, etc. Es un verdadero trauma para los chicos muy jóvenes ser eliminado de la lista de amigos y todo eso se traduce en aumento o disminución de dopamina que nos hace sentir bien o tristes.
La dopamina es la misma sustancia química que nos hace sentir bien cuando bebemos, fumamos, y cuando jugamos o apostamos. En otras palabras, es altamente adictiva.
En casi todo el mundo ya hay restricciones a los menores para fumar, para el alcohol y el juego, y sin embargo no hay ninguna restricción de edad  para el uso del teléfono o las redes sociales. Es como si en la época de nuestros abuelos y padres se les permitiera beber sin restricciones a los adolescentes. Básicamente es lo mismo pues tenemos a toda una generación con acceso ilimitado a una fuente de adicción para combatir los problemas típicos de la adolescencia.
Casi cada alcohólico descubre el alcohol cuando es adolescente. Cuando somos niños la única aprobación que necesitamos es la de nuestros padres, pero cuando vamos creciendo en edad comenzamos a necesitar la aprobación de nuestros iguales.  Esto es muy frustrante para los padres y muy importante para sus hijos que van saliendo de un entorno familiar a un mundo más amplio de relaciones. Es un periodo muy estresante en la vida de los jóvenes cuando se supone que comenzamos a confiar en la amistad.
Algunas personas descubren accidentalmente el uso del alcohol y como consecuencia el efecto de la dopamina para poder lidiar con la ansiedad y el estrés. Desafortunadamente eso queda grabado en el cerebro y, por el resto de la vida, cuando el estrés regresa en forma de estrés económico, familiar, en sus carreras, ellos no se giraran buscando una persona sino una botella.
Cuando le damos acceso ilimitado a los jóvenes al teléfono, los medios sociales o internet en general y no les enseñamos a dosificar las horas estamos creando básicamente el mismo patrón del alcoholismo. En el mundo desarrollado y se va viendo en el nuestro, muchos chicos no saben establecer relaciones en el mundo real. Muchos de ellos, en sus propias palabras, admiten que la mayoría de sus amigos son superficiales,  que no confían en sus amigos, y la razón de todo esto es porque no practican a un nivel físico, del día a día, las formas de establecer relaciones y amistades. Y entonces cuando algún tipo de estrés llega a sus vidas no se giran hacia una persona sino hacia un dispositivo, sea un teléfono, una tableta, un juego de video, a sus redes sociales que le ofrecen un alivio temporal. Ya se sabe que en los países donde tienen acceso total a internet las personas pasan más tiempo en Facebook que conversando con su familia.
Un poco de vino es agradable, demasiado  es malo. Jugar es divertido, jugar demasiado es peligroso. No hay nada malo en las redes sociales y los teléfonos móviles, lo malo está en la falta de equilibrio. Si un chico prefiere comer solo en su cuarto mientras revisa su teléfono todo el tiempo, o si está en un restaurante con sus amigos y está enviándole mensajes a alguien que no está allí entonces tenemos un problema. Si estás en una reunión o estas tomándote un café con un amigo y pones tu teléfono sobre la mesa, da igual si la pantalla está hacia arriba o hacia abajo, le estas enviando a  las personas que están contigo un mensaje  subconsciente  de que no te importan. Y el hecho de que necesitemos tener el teléfono a mano es porque tenemos una adicción. Y como cualquier otra adicción, con el tiempo, tendrá las mismas consecuencias y hará la vida peor.

Impaciencia:

Los jóvenes de hoy están creciendo en un mundo de gratificación instantánea. Si quieren comprar algo lo hacen por internet y al día siguiente lo tienen en casa, quieren ver una película ya no necesitan ir al cine, y así muchos casos más, en resumen, ya no tienen que esperar. Incluso para hacerse de parejas ya no se pasan esos momentos, para algunos angustiosos, para otros hermosos, del nerviosismo de la primera cita para enamorarse, no, ahora se conversa por internet y como nadie nos ve expresamos verdades y mentiras y se pasa directamente al sexo que es la gratificación más inmediata y antes era el último eslabón en una cadena de elementos que fortalecían los vínculos. Eso ya no necesitan aprenderlo porque la recompensa se da desde el principio.
En otras palabras, en el mundo de hoy, sobre todo en el mundo desarrollado que nosotros en el tercer mundo imitamos, todo queremos y logramos obtenerlo inmediatamente. ¡Gratificación instantánea! Todo menos la satisfacción que da trabajo, el fortalecimiento de los vínculos de amistad. Ellos no están aptos para eso, son lentos, se sienten incomodos ante otras personas, muchos pueden llegar a ser  incoherentes y chapuceros en establecer relaciones.
Entonces ves a muchos de los miembros de esta generación que incluso graduándose y consiguiendo un trabajo te dicen que van a renunciar. ¿Por qué?, le preguntas, y ellos te responden que no sienten que están siendo considerados y no están teniendo un impacto en la sociedad. ¡Pero si solo llevas 8 meses trabajando!
La generación milenial tiene su propio concepto abstracto del Éxito. Es como pararse frente a una montaña, ellos solo ven la cima y nunca el camino que lleva a ella con sus vicisitudes y caminos tortuosos. Ni tan siquiera manejan el pensamiento de que este camino puede hacerse más rápido o más lento, no, ellos solo ven la cumbre de la montaña.
Así que una de las cosas que esta generación del siglo XXI necesita aprender es la paciencia. Que las cosas que realmente importan como el amor, los logros en el trabajo, la alegría de vivir, la autoestima y muchas cosas más necesitan tiempo. Que a algunos se nos dan las cosas más rápidamente en algunos campos de nuestra vida no deja de significar que para la mayoría el camino es largo y arduo, difícil, y que si no se pide ayuda a otro ser humano o desarrollas habilidades sociales te puedes caer en uno de los precipicios de la montaña.
Ya se está viendo el peor de los escenarios: el aumento de la tasa de suicidios en adolescentes y niños, de las drogas y sobredosis, el abandono escolar.
El mejor de los escenarios es una generación manipulada y manipuladora que nunca encuentra la alegría de la vida pues nunca están satisfechos, nunca encuentran el verdadero sentido de plenitud, cada vez que les preguntas sobre su vida, sobre su trabajo, sobre sus relaciones te responde con un lacónico ‘bien, como siempre. . ."

Medio Social:

Entonces llega esta nueva generación a la edad laboral. Sea un ambiente corporativo, sea una sencilla oficina de trámites o una cafetería y solo ven números , solo ven estrategias de mercados y no a los seres humanos, a los que manipularán, las ganancias del año en vez del fruto de un esfuerzo de una vida.
Y por supuesto al caer en un ambiente corporativo, un ministerio o una compañía aunque sea menor nunca se van a sentir seguros, no podrán superar al mundo digital para lograr un mayor equilibrio en sus vidas porque siguen buscando la recompensa inmediata y no la gratificación por un trabajo a largo plazo. Y algo que no es saludable es que se culpan a sí mismos, se llaman inadaptados, cuando en realidad ha sido la sociedad moderna la que los ha formado para que sean así.
Y es bueno decirles, a los que quieran escuchar, y sin ser extremadamente benevolentes, que no es su culpa, la culpa es del mundo que vivimos y la falta absoluta de liderazgo verdadero en el mundo moderno que lleve a la humanidad por un sendero de equilibrio interno y externo.
¿Quiénes entonces deben ayudar ahora que los padres siguen haciendo un mal trabajo con sus hijos y las corporaciones de multimedia insisten en crear seres humanos fácilmente manejables?
Supongo que muchos pueden hacer algo, pero entre ellos estamos los maestros. Trabajar más duro para lograr que tengan confianza en sí mismos más allá de un teléfono o cualquier otro equipo. Trabajar más duro para que desarrollen habilidades sociales que les permitan tener una vida sin estrés. Ayudarlos a comprender el papel de la perseverancia en el trabajo y en las relaciones con otras personas, del poder de la comunicación directa, cara a cara.
La sociedad debe tomar medidas ya, las corporaciones y empresas no permitiendo, por ejemplo, celulares en sus conferencias y permitiendo que los empleados interactúen más, se conozcan y se preocupen unos por otros, hasta la sociedad en general, familias y demás que cuando van a comer a un restaurante lleven un solo teléfono para alguna emergencia y así darse tiempo de poder interactuar entre ellos.
Una de las razones por la que los alcohólicos no tienen botellas de licor en casa es porque no confían en su fuerza de voluntad, así que cuando eliminas la tentación todo se hace mucho más fácil, comienzas a fijarte en el mundo a tu alrededor, el real, en el que creas y para el que creas.
La cuestión es que nos estamos quedando sin alternativas, no hay opciones, hay que tratar de salvar a los que van saliendo ahora de la niñez y entrando en la adolescencia. Francamente es lo correcto que debemos hacer los que estamos involucrados con ellos, lo más importante, más que introducirle datos en sus mentes.

MILENIAS  CUBANOS

Y entonces ¿qué sucede en Cuba?
Pues estamos en el mundo al igual que cualquier otro país, ya no tan atrasado comparado con 5 años atrás, aunque compartimos los mismos problemas del mundo desarrollado ya tenemos elementos que van modificando , impactando la sociedad cubana, hasta hace muy poco totalmente cerrada en cuanto tecnología y su acceso a ella por la población.
Solo que Cuba es una isla, que además tiene una forma de gobierno totalmente atípica comparada al resto del continente,  con una sociedad estructurada para la supervivencia y donde hemos aprendido que es la única forma de sobrevivir en el campo de batalla que es Cuba, siempre  entre dos superpotencias. Primero fue España e Inglaterra, después España y Estados Unidos, después Estados Unidos y la Unión Soviética y hoy estamos solos, enfrentados a los restos de la guerra fría y al país más poderoso del mundo en toda su historia.
Los jóvenes cubanos comparten características y sueños con todos los de su generación de otros países, pero en Cuba puede resultar muy peligroso, porque todas esas características llevan implícito una desideologización de la juventud (del mundo) para que nunca cuestione el medio en que se desarrolla y busque alternativas, es un fenómeno mundial y la idea es que vivimos en una aldea global y no tienen importancia el país, la nacionalidad, la ideología, y mucho menos conceptos como la Patria y la soberanía nacional.
Entonces, y ya lo estamos viendo, las conquistas ya no son físicas, el nuevo campo de batalla es la mente y el alma, y en el caso del Cuba una generación con muchos integrantes apolíticos que se vuelven una entrada a ideas e iniciativas que pueden ser no solo  contraproducentes sino totalmente inapropiadas, por no decir peligrosas incluso a nivel de país. Y no hablo de cuestiones tan tontas como si que en la Habana no existe un McDonald o un Starbucks,  hablo de una población juvenil cuyo único objetivo va siendo la obtención de objetos y placeres los cuales creen merecer por el solo hecho de estar vivos sin hacer casi nada a cambio e identifican a la generación de sus padres como un obstáculo para la consecución de sus sueños, creen que su país es una isla maldita que no merece que ellos hayan nacido aquí y por lo tanto la mejor solución es emigrar donde la vida seguramente es mas fácil y los valoran más por ser jóvenes, o bellos, o por haber sido víctimas del comunismo o de la desaparición de este y el cambio de vida radical en Cuba.
Pero al final es la misma historia, la incapacidad de unos padres y familiares de haberlos educado apropiadamente de acuerdo al lugar donde nacieron y sus necesidades. La obtención de sus deseos tan rápidamente como sea posible sin pensar en los esfuerzos o sacrificios que conllevan. El uso de la tecnología para fines vanales y sin repercusión social sino solamente con fines egoístas y en el caso particular de Cuba se suma la incapacidad y muchas veces renuencia de un sistema político que se niega a abordar este tema libremente y sin consideraciones políticas, limitando el uso de la tecnología con fines sociales, de prosperidad individual y satisfacción realista de los cubanos de hoy en día.

Entonces al efecto habitual de la dopamina por la satisfacción que dan las redes sociales y los teléfonos se suma la satisfacción de estar en posesión o haciendo algo que le molesta muchísimo al gobierno.

cubangel@gmail.com

domingo, 4 de marzo de 2018

CONVERSACIONES CON EL FRAILE (I)



Hace un mes  mas o menos me lo encontré muy cerca de la casa. Yo sentí como un barullo en la calle 23, pero la verdad que era la hora de salida de las escuelas y la muchachera  siempre tiene sus razones para declarar a los cuatro vientos sus grito de independencia y alegría por el fin del día en la escuela.
Pero a medida que me voy acercando al punto de origen , ya saben, esa curiosidad de maestro que busca a ver si hay algún rostro conocido, algún alumno propio que sea el causante de algún desorden, voy comprendiendo la situación.
Y me explico. En la esquina de la escuela hay una iglesia. Grande. Es decir, tiene edificios anexos y con ellos se hizo una especie de hotel para los religiosos que están de paso por la ciudad. Y esta vez , a diferencia de otras veces, no son monjitas las que circulan de un lado para otro, entrando y saliendo todo el día, sino todo un pequeño ejercito de sacerdotes o seminaristas de Polonia, Eslovaquia, y Hungria.
Y las chicas cubanas no perdonan a un ejercito de hombres rubios en faldas y sandalias. En las clases han surgido innumerables preguntas que resumiendo mas o menos tocan estos temas: la virilidad, estudios religiosos, sotanas y mantos, malgasto genético, y muchas mas.
Y regreso al barullo. Cuando me aproximo veo esto: una fuente de aguas albañales en la acera, un sacerdote cruzando toda esta suciedad con la sotana a media pierna, mostrando unas piernas fuertes en sandalias.
Lo reitero, las chicas cubanas no dejarían pasar una oportunidad así. Lo saludaban, le silbaban como piropeándolo, “where are you from? Y muchas risas.
En fin, algunas de mis alumnas y alumnos estaban en el grupo de ‘acosadores’ y me decidí a interrumpir la fiesta que no dejaba que Mickhael lograra llegar a terreno seco.
A partir de ese momento nos reunimos en las tardes, en el portal del hotelito, en la misma esquina de la escuela, frente a una bodega y una carnicería y nos tomamos un café . Mickhael interesadísimo en saber mas de nosotros. Y para mi lo mas interesante ha sido ver a tantos y tantos cubanos , los que viven y los que simplemente pasan cerca e intervienen en las conversaciones, expresándose de manera tan sincera sobre la realidad que vivimos.
Entonces, sin orden cronológico les cuento.
Tema de hoy: la Reunión del parlamento cubano. Opinon general: mismo coro de siempre. Que no se avanza, que no se trabaja bien. Que sin decirlo te dicen que el socialismo es una porquería en la economía, pero que hay que mantenerlo.
¿por qué pregunta Mickhael?
¡clarísimo amigo!, porque no saben hacerlo de otra manera. Son todos unos viejos que no saben hacer las cosas de otra manera y tienen miedo de que si se hacen de manera diferente se descubran cositas.
Por otro lado, el tema de los logros de la salud y la educación.
Si claro, parece que es una deuda impagable. Lo hicieron hace mas de 50 años  y parece que invalidaron los éxitos de los siglos XX y XXI para los cubanos.
¿El tema caliente? Los impuestos. En masa y abarcadores.
¿entonces? Nos joden por el lado socialista con lo del salario real y el nominal  y ahora , además, descubriendo el capitalismo y su productividad como están, nos clavan los impuestos.
Ha sido una jugada perfecta. Hace un tiempo lanzaron a casi un millón de personas a su suerte. Después dieron la posibilidad de que trabajaran por cuenta propia al otorgar permiso para muchas actividades que antes estaban prohibidas (la que mas me impactó fue la de ‘enderezador de clavos’) y ahora no solo tienen que pagar permisos y la seguridad social sino también impuestos sobre la ganancia.
Brillante es, no caben dudas, y no sé por qué me recuerda a Moises en Egipto.
¿tiene sentido? Para ellos sí. Para nosotros no. Es decir, el gobierno como gobierno tendrá mas dinero y menos trabajadores improductivos que mantener. Y nosotros menos dinero.
Así que  regresamos al punto de siempre, ‘todos somos iguales lo que unos mas iguales que otros’.
Estas son las preguntas al final del día de Mickhael: ¿Quiénes son los cubanos que dirigen empresas mixtas? ¿quienes son los cubanos que viajan frecuentemente al extranjero? ¿Quiénes son los cubanos que abren paladares lujosas y tienes mercedes Benz y Audis que ha visto por las calles? ¿Quiénes son los cubanos que viven en Miramar y Nuevo Vedado en las grandes mansiones?
Bueno, eso para otro día que parece que el tiempo va a cambiar y hay cosas que hacer. Mañana será otro día, otro cafecito con el Padre Mickhael de Polonia y quizás algún vecino le pueda responder sus preguntas. Yo puedo, pero me encanta escuchar como los cubanos además de sapientes imparten venganza con la lengua afilada.
Déjame algún comentario o pregunta si lo deseas
cubangel@gmail.com


domingo, 10 de diciembre de 2017

EL PASADO



Hace poco días un amigo extranjero me escribía  comentándome que en su intercambio de emails con diferentes cubanos había notado que nosotros nos quejábamos todo el tiempo,  sobre todo que siempre hablábamos  de una manera incomprensible sobre el pasado,  cuando debia ser algo que debíamos olvidar y seguir adelante.
Y claro, eso me dio pie a pensar sobre el tema.
Coincido en  que las experiencias negativas y desagradables, e incluso terribles, hay que luchar por dejarlas atrás. Pero en el caso de los cubanos usualmente nos referimos a otro tipo de experiencias, es mas, a experiencias totalmente diferentes.
¿renunciarías o pondrías en el olvido experiencias y recuerdos de una vida casi perfecta desde el punto de vista humano? Supongo que no, y es por eso que siempre prima en nuestras mentes ese lamento, ese tono plañidero.
Cada generacion tiene un pasado diferente, Un pasado que una es una linea continua, es un pasado que ha sido retorcido varias veces hasta quebrarse.
Para algunos cubanos la vida de antes del 1959 era excelente. Para unos cuantos era maravillosa, para algunos mas mucho mejor que la actual. Pero entre los que vivimos en este momento y el año 1959 hubo un paréntesis de 30 años, es decir, hasta el año 1990 en que cayó el muro de Berlín.
En esos 30 años sucedieron muchas cosas malas para Cuba . Hermanos contra hermanos lucharon en una escala nunca pensada. La familia cubana se dividió no por un muro de concreto sino por uno de agua de 90 millas de ancho. Nos vimos viviendo bajo una presión enorme entre los intereses de dos superpotencias.
Y entonces, ya a fines de los 1960’s , casi 10 años después ya había surgido una nueva generación de cubanos en la isla, que junto a sus padres,  se habían adaptado o verdaderamente aceptado la nueva ideología, construían un nuevo tipo de sociedad. Era como un gigante con pies de barro, pero se erguía año tras año como el coloso de Rodas en una región bien pobre y cada vez mas dominada por las guerrillas, los golpes de estado, las dictaduras militares. Y nosotros acá, para bien o para mal, aislados en nuestra pequeña isla ,vivíamos una explosión demográfica que siempre indica que las condiciones de vida mejoraban y era un buen momento para tener hijos y verlos crecer en un ambiente libre de violencia, las mujeres ganaron terreno hasta el punto de que hoy en día mas del 50% de los profesionales en Cuba son mujeres. La electricidad, el agua, el transporte público y demás costaban casi centavos, por no decir que durante años las llamadas en los teléfonos públicos fueron gratis.
Es cierto que debido al conflicto con Estados Unidos se impuso una libreta de abastecimiento o racionamiento si prefieren llamarla así , pero para cada cubano estaba garantizado carne, pollo, pescado, lácteos, y en fin toda una gama de productos a precios de centavos. Cada niño hasta los 7 años recibía un litro de leche diario por 20 centavos al día. . .cada quinquenio  disminuían los productos, pero era una garantía
La lista sería infinita. Y aunque para muchos la realidad era asfixiante por no haber libertades políticas, es decir partidos políticos diferentes, y en mucho tiempo de viajes,  problemas con la religión, etc, para la mayoría de los cubanos fueron años calmos, de trabajo, de enfrascarnos en el amor físico y la diversión, en los estudios, y en general se pensaba que en definitiva la construcción de una nueva sociedad llevaba implícita el barrer con los lastres de la sociedad  (religión, avaricia, riqueza a costa de la pobreza de muchos etc).
Y fue relativamente fácil controlar la sociedad pues las nuevas generaciones no conocían la anterior. Solo sus templos (edificios públicos, iglesias, centros comerciales) eran una muestra muda del poder económico que tuvo la clase media cubana, pero claro. . . “a costa de tener a una mayoría oprimida”, según las palabras de los nuevos dirigentes .
Mi infancia.
Mirando atrás fue casi el paraíso en la tierra. No porque tuviera todo, sino mas bien por lo opuesto, es decir, no había diferencias entre los chicos de Cuba, o al menos los de la Habana. Mis padres lucharon por proveerme de un mundo espiritual que compensaría en gran medida la gran deuda material que el gobierno cubano tiene con mi generación, que la vida tiene con nosotros.
Había no obstante un precio a pagar.
Pero mirando atrás,  los rostros los recuerdo mas luminosos que los de los cubanos de hoy en día. Hemos descubierto que hay un mundo exterior, maravilloso en posibilidades, pero aun lejano, todavía bastante inalcanzable por la mayoría de nosotros. Un mundo exterior que de seguro nos ofrecería la posibilidad de explotar en potencialidades con la enorme preparación que hay en este país (es algo que por otro lado siento que va decayendo, pero ese sería otro tema para otro email).
Siempre que trabajo con algún latinoamericano, sobre todo del área del Caribe y Centro América , les digo que recen para que el bloqueo de Estados Unidos y Fidel Castro  duren mucho tiempo, porque el día que Cuba pueda estar libre de el conflicto actual,   la luz que saldrá de acá no permitirá que se vea nada mas en el Caribe.
Desde que somos muy jóvenes se nos educa en el estudio de la sociedad moderna. En sus leyes, en como construirla si tuviéramos la posibilidad (ya sabes que siempre se culpa a los yanquis) y en como destruirla. En como hacer que personajes como un Chávez, como un Evo Morales, como un Rafael Correa o un Daniel Ortega se conviertan en aliados como en otro tiempo lo fueron Michael Manley de Jamaica, Bishop de Granada, Salvador Allende en Chile e infinidad de reyezuelos y presidentes de Africa, Asia y Medio Oriente.
Hace mucho tiempo tuve muchos intercambios con venezolanos que se molestaron  con mis comentarios de todo lo que  sucedería en Venezuela. Según ellos ofendía la inteligencia del pueblo venezolano al tan siquiera sugerir que pasarían tales cosas. Y es que no tiene nada que ver con la inteligencia de un pueblo, es tan solo la habilidad para controlar la mente humana y mezclar verdad y mentira, voluntad y humanidad, amor intrínseco de cada ser humano que los lleva a ser solidarios con los que están debajo y sufriendo . . .y que una vez salvados,  se les demanda una fidelidad rayana en la sumisión.
Donde quiera que estén esos pueblos que han optado por una izquierda mas radical hoy en día ya nosotros, los soviéticos, los polacos, los alemanes del este, los búlgaros, los rumanos, los checos, los chinos, etc. ya estuvimos. Y nosotros los cubanos fuimos los designados por todo ese imperio rojo ya desaparecido en apariencia, pero aun con sus bases ideológicas presentes, para ser la punta de lanza en el tercer mundo y minar la base del así llamado imperialismo mundial
Los cubanos de la isla hemos estado , ganado o ayudado a ganar guerras en Nicaragua, Argelia, Etiopia, Congo, Angola, Namibia, Viet-Nam, en todas las guerrillas de América Latina.
¿Y como vine a parar acá? ¡ah sí!, cuando yo era niño todo eso y mucho mas ocurría y nunca se decía nada al respecto. Pero sin embargo día a día se nos educaba con el propósito de ser inflexibles en el principio fundamental: el capitalismo es intrínsecamente maligno y lleva la muerte dentro del mismo : la clase obrera.
Himnos de Gloria, futuros no imaginados por nadie excepto en Cuba, un hombre nuevo libre de las fuerzas del mercado. Un hombre nuevo que estaba dispuesto a renunciar temporalmente a la libertad individual y los beneficios del mundo material por un objetivo mas grande que él mismo.
Y sin embargo todo se fue abajo porque el nuevo imperio rojo colapsó. Con solo 70 años (en el caso de la URSS, el mas longevo) era imposible que pudiera sobrevivir una competencia con un sistema de mas de 4 o 5 siglos, sobre todo después de haber pasado por dos guerras mundiales y tan solo en la segunda haber perdido unos 20 millones de vidas.
Y ahora estamos en estos tiempos. Como desintoxicándonos. Y por eso a veces lo que escribo no tiene mucho sentido para los amigos a quienes escribo, porque fui criado en un ambiente totalmente diferente y del que aun quedan vestigios, que si no demoran mucho en venir podrán palparlos.

Ciertamente, por otro lado, que tienen razón , soy alguien por momentos melancólico. Cuando la gente me lo dice, que mis ojos parecen tristes siempre les digo que es cansancio,  es que me avergüenza un poco estar triste , el dejarme llevar por la melancolía. Pero lo he superado en gran medida, pero claro, aun se me nota, sobre todo cuando escribo.

cubangel@gmail.com



viernes, 8 de diciembre de 2017

CONVERSACIONES CON EL FRAILE (II): Una equivocación y una paliza

Una equivocación y una paliza
Pues sí Mickhael, ya que tu país también tuvo  este tipo de gobierno, no te resultará extraño que esas cosas sucedan.
Y como en todas partes, el ser un informante de la policía es algo denigrante, y si se sabe puede ser peligroso. Al menos hoy en día. Hubo una época en que era considerado hasta honorable, ya sabes, defendiendo los valores de la nueva sociedad. La ideología logra lo que no puede la propaganda.
Pero en fin, particularmente en estos tiempos es muy peligroso el ser tachado de informante. Y en el menor de los casos es una forma casi segura de lograr el ostracismo de la otra persona.
Yo vengo del hospital. ¡que escena! ¡que historia!
Que triste en verdad.
Pues resulta que un compañero de trabajo muy bueno que tenemos fue golpeado muy cerca de su casa. Ya sabes que ahora oscurece mas temprano, y él para cortar camino atraviesa un parque que ya a esa hora, y sin las luces, es una boca de lobo. ¡Pero es que en su barrio todo el mundo lo quiere mucho!
Pues nada , casi de milagro alguien pasaba cerca y lo ve arrastrándose. Toda una casualidad, y gracias a Dios que tuvo las fuerzas para poder arrastrarse.
Y no hubo que esperar mucho para enterarnos de todo. Resulta que había una mujer en su barrio, una mujer que ayudaba mucho y visitaba frecuentemente que parece se enamoró de él. Ella bastante mayor en verdad, pero en fin, esas cosas pasan. Pero claro, no era la única persona que mi amigo visitaba y ella un poco que celosa de las amistades , sobre todo de una vecino en común con el cual charlaban los domingos por las tardes, se le ocurrió usar la medicina del miedo: llamó a un amigo del vecino, le dijo que el maestro era un informante de la policía y que tuviera mucho cuidado con lo que hablaba delante de él.
Lo que ella no sabia era que además de ese amigo, esa persona que ella llamó conocía también  a uno de los maleantes mas grandes de la zona y al que la policía le había hecho un registro en su casa hacia muy poco tiempo decomisándole todo lo que tenia mal habido. Así que lo primero que hizo esa persona fue llamar al maleante y advertirle, solo advertirle, que tuviera cuidado con el ‘maestrito’ del edificio de la esquina que era un informante de la policía. Todo muy que en secreto y de amigo a amigo. Solo para que tuviera cuidado.
Pero claro, si no quieres que las cosas tomen caminos tortuosos debemos conservarlas bajo siete llaves. Una vez que ya están fuera de nosotros no tenemos control sobre ellas. Ni corto ni perezoso el maleante y sus secuaces partieron hacia el parque , esperaron y dieron una paliza “ejemplarizante” a los ciudadanos: el chivato lo paga.
Y allí estaba ella, en el hospital, llorando a mares, pidiendo disculpa a la familia. Creo que la quieren acusar.
Yo diría que en las sociedades modernas, el ser confidente de la policía es el octavo pecado capital para el resto de la población.
Muy agradable el café de hoy, como siempre, pero ya me marcho, voy a casa, a tratar de borrar las imágenes que me tocaron hoy.

 cubangel@gmail.com


sábado, 13 de mayo de 2017

CUBA, JUGUETES Y ENANOS (O LA RELATIVIDAD DE LAS COSAS)



Uno de los recuerdos más antiguos que guardo en mi mente es de unos juguetes que me acompañaron en los primeros años de mi vida. Realmente por muchos años. 
Fueron parte de uno de los últimos cargamentos que entraron en Cuba después que el gobierno americano decidiera comenzar su embargo, o bloqueo, como quieran llamarlo. Todavía la economía cubana no se vinculaba a la economía del campo socialista y navegaba hacia el desastre.
 El último cargamento de cosas para niños fueron juguetes y botitas blancas.
Yo nací un tiempo después y cuando tenía unos 3 años pude tener ambos preciadísimos bienes. Un amigo de mi mamá que trabajaba en una tienda los tenía en el sótano de la tienda, escondidos,  para cuando el amor de su vida (mi mamá) tuviera algún día un bebé.
Ella recuerda que le emocionaron tanto las botitas blancas que no pudo evitar quitarme de los pies mis zapaticos gastados y ponérmelas para ver cómo me quedaban. Y con ese instinto humano de gustar de las cosas bellas y nuevas no hubo dios que pudiera quitármelas. Nos demoramos como media hora en salir de la tienda y solo después de “hacerme comprender” que no podía mencionar a nadie que las botitas eran nuevas.
Yo estaba rojo de la emoción, con zapatos nuevos y los 7 enanitos de Blanca Nieves, llenos de color y alegría que por arte de magia salieron del sótano húmedo de una de las tantas tiendas vacías de la calle Monte, en la Habana Vieja, el centro de las tiendas de polacos (judíos) de antes del 1959
Y tenía solo 3 años, y ciertamente la alegría y las ganas de correr con mis botitas nuevas y jugar con unos juguetes de verdad me sobrepasaron. Y en cuanto salimos de la tienda le señalaba a cuanto habanero me pasaba por al lado mis pies y le decía: “mira tengo zapatos nuevos”
Mi mamá recuerda que tuvo que cargarme y literalmente salir corriendo ante las miradas y preguntas de otros tantos padres que pensaban que habían abastecido las tiendas en algún lugar y las había comprado.
Fueron tiempos difíciles. 
La parte más dura la pasaron las padres tratando de vestirse y alimentarse a ellos y sus hijos, pero lo que yo recuerdo es que por algunos años esos enanitos de Blanca Nieves fueron mis únicos juguetes. Y en recompensa todavía conservo a 5 de ellos. Los otros dos tuvieron destinos muy diferentes. Uno fue una víctima del amor: lo regalé a una niña muy linda que vivía en frente de mi casa y que solo un año después, cuando comenzábamos en la escuela, se mudó y nunca mas la vi.
El otro tiene mucho que ver con mi origen muy humilde. No entrare’ en detalles, solo que teniendo unos 4-5 años me desperté y cerca de mi camita vi a una rata enorme (realmente enorme). Al moverme ella se volteó y sus ojos rojos no se me fueron nunca de la memoria. Junto a mí, en la cama, tenía a mi más preciado tesoro: mis 7 enanos. Sin dejar de mirarla estiré el brazo, agarré uno de los enanos y se lo lancé a la rata. Le picó muy cerca y la disuadió de aproximarse, se iba hacia el hueco de donde había venido cuando de repente se detuvo, regresó y empujando a mi enano se lo llevó. Lo curioso es que mi mamá estaba en la habitación de al lado y solo notó algo raro cuando escucho mis sollozos y me encontró sentado al borde la cama. Había perdido un amigo.
Fueron mis mejores amigos. Se convirtieron en soldados, en barcos, en proyectiles, en boxeadores, y lo más importante: mis confidentes de cada noche. Y al igual que a los héroes de una guerra los conservo como recompensa por haberme dado una niñez.

Ya para entonces teníamos la libreta de racionamiento que las argucias de la política y la semántica oficial era llamaba “Libreta de Abastecimiento”. Una para la comida y otra para la ropa y zapatos. Por algunos años hubo un cupón que nunca pudo ser tachado o arrancado (se cambiaba de modelo de vez en cuando): el de los juguetes.
Un dia llegó la gran sorpresa. A partir de ese año (debió ser a principios de los 1970’s) cada julio todas las tiendas del país se llenaban de juguetes. Por seis días se venderían esos juguetes y cada niño cubano tendría 3 juguetes. A cada familia con niños menores de 14 años se le asignaba una tienda, usualmente en el barrio.

¿ Y cómo evitar el caos?

Se creó un sorteo, una rifa. Al principio eran por llamadas telefónicas y poco a poco se iban llenando las listas. Más o menos 200 turnos por día. Pero claro, eso creaba diferencias entre los que tenían teléfono y los que no, así que un cierto año se determinó que como todas las familias tenían libreta de racionamiento, y ésta tenía un número se haría un sorteo secreto y las listas serian publicadas en las vidrieras de las tiendas dos semanas antes de que comenzaran las ventas.
Se distribuían los niños en seis días. 
En una Cuba atea  todos los niños mirábamos al cielo esperando por el milagro de que nos tocara el primer día y no el sexto cuando ya los mejores juguetes habían sido comprados. A cada niño le correspondían 3 juguetes: Un juguete grande (básico), uno mediano (no básico) y uno pequeño o de poco valor (dirigido).
Comenzaban entonces a dar frutos las “enseñanzas” de los rusos y del mercado negro que aprovechaban al máximo. En otras palabras, había padres que vendían el derecho a juguetes de sus hijos a otros padres que tenían más dinero y le compraban a sus hijos  el doble o el triple de la cantidad que recibían los otros niños.
Yo solo una vez vi algo asi. En mi cuadra, y fue triste, claro está.
 Ahora ya de grande comprendo que gota a gota mis padres me inculcaron unos principios que me hicieron el ser que soy. Fue una cuestión de principios no comprar el derecho de otro niño  para no dejarlo sin juguetes.  Los padres que sí hicieron cosas como esas formaron a esos hombres y mujeres de hoy en día que están apoderándose del país o permitiendo que los esfuerzos de tantas generaciones estén en peligro.
Algo que repito una y otra vez: Los pobres de hoy somos  los hijos de los honestos de ayer.
Hoy las cosas son diferentes. Hay juguetes en las tiendas, en casi todas, pero ya no hay sorteos. Hoy en día los padres, como cualquier padre de un país pequeño, pobre y con problemas políticos como los que tenemos,  deben escoger entre comida, ropa y zapatos o juguetes para sus hijos.
 Regresaron los Reyes Magos el 6 de enero. Nuevamente hay niños con juguetes carísimos y otros con casi nada. Es lo “normal” me dicen. Así es en todas partes.
Cuando les cuento a mis alumnos estas historias  muchos desearían que regresaran al menos esos 3 juguetes seguros cada año. Pero eso, como algunas otras cosas,  se perdieron cuando cayó un muro que dividía a la fría Alemania. Ya saben, el efecto mariposa. Tumbas un muro y el mundo se tambalea y todo un modo de vida desaparece haciendo que nuevas cosas sucedan y regresen algunas del pasado.
Hay algo importante que aún nos queda: compartir lo que tenemos. Ese es por el momento el remedio. La solución está aún por definir.
Desde que me hice maestro esa fue una prioridad para mí, los niños y su alma. Pudiera decir que mi trabajo termina cada día a las 6 pm. Pero no. Hay que ayudar en lo posible. Nunca se puede ayudar a todos, ojalá, pero hay que hacer lo posible. Recuerdo con satisfacción el día que logré conseguir 40 osos de peluche, otras veces fueron pelotas de tela, pelotas de baseball  y guantes de baseball para zurdos (¡todo un milagro!), y en fin, lo que las buenas personas que vienen a Cuba traen con el corazón en la mano.
Hoy cuando llegan a Cuba personas con “diamantes en las suelas de los zapatos”, como dice la canción, quisiera tener la capacidad (llámenla también inteligencia o habilidad) para llegar a ellos y lograr que ayuden, pero no me es posible.

Pero nada, ¡animo!, los niños también agradecen sombras chinescas en una pared o en un patio de recreo lleno de sol. Y me digo:
 NO ESTES DESANIMADO, EN EL MUNDO DONDE VIVIMOS QUE HAY TANTO PARA COMPARTIR Y PARECEMOS TAN PEQUEÑOS, ES MARAVILLOSO QUE DE VEZ EN CUANDO SURGEN GIGANTES QUE NI TAN SIQUIERA SABEN LA FUERZA QUE TIENEN Y CAMBIAN LOS ACONTECIMIENTOS CON UN LINDO JUGUETE, O UNOS LAPICES DE COLORES, CONVIRTIENDO A UN NIÑO TRISTE EN UNO FELIZ, A UN FUTURO SER HUMANO RESENTIDO EN UN BUEN HOMBRE O MUJER.